José Torres, representante de Congo, me dice que el colombiano no jugará en el Sporting. Es su decisión y así se lo comunicó. Además, le pidió que le busque al mejor postor. Así es cómo el club rojiblanco se queda compuesto y sin su más querida novia, a 18 de agosto y con sólo trece días de margen para acertar enel sustituto.

La postura de Congo puede considerarse razonable desde el aspecto puramente crematístico, aunque esta decisión podía haberla tomado en junio y evitado un culebrón de tal magnitud. De esta forma, el jugador quedó mal en Gijón y el Sporting, en evidencia. Ahora emergerán todos aquellos playos del “eso ya te lo decía yo”.

La intención del señor Torres, que, además de amigo de Congo, es director deportivo del Villalba, equipo de Tercera División de la territorial madrileña, era que su representado volviera al Sporting. No debió tener mucho poder de convencimiento.

El caso es que estamos 18 de agosto y Congo nos dio calabazas, aunque Preciado no tiene mucha confianza en lo que dijo Torres. Tal vez porque tiene tanta confianza en su amigo Edwin que no quiere descartar su regreso. El problema que pueda tener ahora el moreno (apelativo cariñoso que aplican sus ya ex compañeros) para encontrar un equipo con una ficha alta y cerca de la Valencia de su novia no nos importa, pero sí el del Sporting. Congo no tuvo una postura ética, pero el Sporting picó de pardillo. Esta opción tenía que estar barajada desde junio.

Se dice en el club que “hay cosillas” en negociación. Alguna está medio avanzada, porque siempre se tuvo convencimiento de que el moreno iba a venir. Se espera ahora un descarte de Primera. El jugador que se elija vendrá con pretemporada hecha, pero necesitará una adaptación. De todas formas, si viene de Primera, la calidad estará asegurada para rendir en Segunda. A ver si hay suerte. Por cierto. Un amable bloggero apunta el nombre de Antoñito, que subió con el Murcia y estuvo con Preciado en Santander. No se pulsó, por el mismo motivo que se rechazó a Aranda. Cuestiones extradeportivas.

A lo mejor nos vino bien el retraso del colombiano, quien se quedará sin el ‘Molinón de plata’ que le otorgaron las puntuaciones de las peñas, según las sumas de Pepín Braña. Si las hizo con calculadora estarán bien, pero lo que no calculó fueron las calabazas de Congo. ¡Ya tenemos debate!

PD1: Ayer, en Luarca, vimos claro cual es el Sporting titular. El míster, también. El fútbol es así de sencillo.

PD2: Tengo pendiente un acuse de recibo a don Ángel Fernández, compañero de As en Oviedo, con una sana, elegante y educada rivalidad. La semana que viene habrá tiempo.