Fue un fin de semana completo. Victoria del Sporting y empates de la Real y del Málaga. Lo hubiéramos firmado antes del partido del sábado. También extraordinario el filial, que dejó al Noja en la cuneta, en un partido con algunos apuros. Y, además, es el único asturiano que pasa a la siguiente ronda. ¡Quién iba a decirlo hace tres meses!
Empieza la semana y después de las celebraciones por el triunfo del sábado toca centrarse en el siguiente encuentro. Luis Morán y Gerardo Ruiz fueron expresivos después de ganar al Córdoba. Ahora, el sueño del sportinguismo es subir en Castellón. Para eso hay que ganar y esperar lo que hagan el Málaga en Motril, contra un Granada 74 que se juega la vida, y la Real en Vitoria, contra un Alavés que tiene en juego la permanencia.
Llegó la hora de la verdad y las primas parece que se acabaron, aunque tanto el Castellón como el Eibar las están esperando. Es posible que, en el caso de los de Castalia, ya las tengan. El vestuario de Ipurúa quiere que el ascenso del Sporting no se resuelva esta semana, para llegar untados a El Molinón. El lícito querer un premio, aunque venga de fuera. No sé si es que ahora preocupa menos o es que se convirtieron en rutina.
Lo conveniente es no adelantar acontecimientos. Una derrota en Castellón podría complicar las cosas. El partido va a tener un colorido rojiblanco excepcional. No se lo quiere perder nadie, aunque el viaje de regreso sea una paliza. Merecerá la pena.
PD1.: Vega-Arango no tiene intención de negociar la venta de la plaza de Segunda B al Oviedo, en el caso de que el filial rojiblanco ascienda. A lo mejor la vende el Caravaca.