Habrá invasión rojiblanca en Soria. Muchos más que los atrevidos que desafiaron el frío en octubre en el partido de Copa, pero menos de los que podrían ahora, por el problema de las entradas, que empieza a ser algo habitual. Hay críticas a la Federación de Peñas por el reparto de localidades, pero, en este caso, no veo una justificación. El Numancia envíó 1.000 localidades al Sporting y el propio Sporting le dio alguna más de 700 a la Federación, que atiende primero a las peñas federadas.
Después de algunas experiencias negativas y con demasiadas protestas, el club se quita de en medio problemas y sólo está en disposición de gestionar la venta de localidades para un desplazamiento si el club rival facilita un número que permita atender la demanda de su afición. Estas cosas sólo sirven para que el que se quede sin entradas se moleste. Y quien tiene una paciencia como el santo Job es Eduardo Díaz, que escucha a todos y soporta casi todo. Hay peñistas o aficionados particulares que creen que tienen derecho a todo. Otro tema es que no guste la fórmula escogida para el reparto, que fue por orden riguroso de reserva, según me comentó el propio Eduardo, quien me dice que si alguien aporta una fórmula que agrade a todos está en disposición de escuchar, consciente de que criticar es gratis.
Lo que importa ahora son los tres puntos de Soria. Después del paso de gigante dado en Pamplona y del extraordinario triunfo sobre el Deportivo, ganar al Numancia significaría, por lo menos, media permanencia. Por eso hay que repetir que debe utilizarse el mismo talante utilizado en el Reyno de Navarra y frente al Deportivo. Ese es el camino.
Los más de mil rojiblancos que estarán en las gradas de Los Pajaritos podrán disfrutar de verdad, si se mantiene el estilo más reciente, pero sin olvidar que enfrente estará un equipo rocoso, que lleva una línea horrorosa fuera, pero en su campo está mucho mejor que la mayoría de los de abajo. El último en caer en Soria fue el Valencia. El secreto es concentración, agresividad, disciplina táctica y, por supuesto, acierto.
PD.: Pueden estar todos tranquilos. El Sporting no tiene ninguna intención de traspasar a Cote. Si los técnicos del Real Madrid, el Barcelona, el Valencia y el Atlético siguen su trayectoria, debe ser un orgullo para el chaval, que tiene la cabeza muy bien amueblada, y también para el club. Respecto a la forma de llevar la entidad, el consejo que preside Vega-Arango recondujo la situación y hasta adelanta el pago de deudas. Es un mérito que debe ser reconocido. En este momento no sólo no caben críticas, sino que no deben escatimarse los elogios.