Viene el Racing. Es en lo único que hay que pensar y, aunque a Preciado no le guste calificar estos partidos de finales, por aquello de no dramatizar, la realidad es que hay que afrontar el partido como si lo fuera.
El equipo cántabro es otro de los que lleva una línea marcada por la irregularidad. Muñiz estuvo cuestionado cuando el Sporting fue al Sardinero, allá por noviembre, pero el triunfo en un partido de UEFA ante el Schalke 04 y los tres puntos que su equipo ganó a los rojiblancos dieron la vuelta a la tortilla, aunque el equipo gijonés perdió por un rebote, en un tiro de Tchité que dio en la cara de Gerard para despistar a Cuéllar. Después.
En Santander hasta se pensó en volver a la UEFA. En Gijón pasó algo similar. Tras un inicio desolador, la reacción fue espectacular, hasta alcanzar la mitad de la tabla. Se soñó con puestos UEFA antes de la visita del Atlético. Si el Sporting llega a ganar a los ‘colchoneros’ se hubiera alcanzado tan mágico puesto. Un simple sueño, como el de los cántabros.
Con los pies en el suelo, el objetivo es la permanencia. Está al alcance de la mano, pero también puede complicarse. Ganar al Racing es prioritario. Es un rival similar al Sporting. Hasta tiene los mismos puntos. No debe asustar el dúo desigual que forman Pereira y Zigic o la reaparición de Tchité, ni un centro del campo más trabajador que constructor, pero con fuerza para las llegadas y los contraataques.
Se podrían elucubrar múltiples cuentas al pensar en que por El Molinón, donde puede estar la permanencia, tiene que pasar rivales como el Espanyol o el Recreativo, que están metidos en la pomada. Los onubeneses tienen pendiente de enfrentarse a los cuatro de arriba, como también les tocará a Mallorca, Osasuna y Getafe.
De momento, lo que importa aquí es ganar al Racing, objetivo factible, si se afronta con el espíritu del día del Sevilla, aunque el rival sea muy distinto en el aspecto táctico y técnico. Si se expone ya como argumento que es “un equipo que no nos va”, también puede aplicarse que el Sporting es “un equipo que no leva al Racing”.
No sé si será bueno obsesionarse con lo que hagan los demás, que es algo que por aquí se mira mucho, pero es mejor que los demás se obsesionen con el Sporting.