El traspaso de José Ángel al Málaga es algo que se daba más que se da por hecho. El jugador está de acuerdo con la propuesta y acepta irse, al Sporting le parece bien la propuesta de tres millones de euros, más incentivos posteriores.
Con las tres partes de acuerdo, lo lógico es que la operación se cierre, pero hay un doble freno. Por una parte, el Sporting no quiere riesgo de cobro. Por otro, no se quiere crear un conflicto social, aunque la ‘operación José Ángel’ permite dedicar más a fichajes y, por otro lado, no deja a uno de los internacionales en el banquillo. El puesto está cubierto también por Canella, quien tuvo al de Roces en el banquillo hasta que se lesionó. Preciado tiene previsto recuperarlo cuando pueda, aunque ahora es justo y mantiene a José Ángel en la titularidad, porque hizo dos buenos partidos.
Tres millones de euros por un lateral parece una buena oferta, completada con otros incentivos, como un 10% de un traspaso posterior y una cantidad si el de Roces llega a ser internacional absoluto. Si el cuadro técnico tuviera el convencimiento de que la proyección iba a ser máxima, es posible que se opusiera al traspaso, pero valorando otras circunstancias, esa confianza no es real. Parece que hay más cosas.
Saber qué podrá pasar en un futuro no es fácil. No cabe duda que José Ángel tiene unas condiciones extraordinarias, pero es víctima de uno de los problemas made in Mareo, donde no se trabaja a conciencia con los jóvenes que necesitan ser pulidos en sus defectos.
Lo valorable es si el traspaso permite no debilitarse en el puesto y acceder a dos refuerzos de importancia, para salir de la zona de descenso. Y no olviden que el problema de este Sporting es el gol, bien por defectos de planificación del técnico o bien por la inoperancia de los actuales delanteros. Respecto al traspaso, el Málaga esperará dos días. La calle puede tener su opinión,pero la responsabilidad es de los que mandan. Les deseo que acierten.