Tras una semana complicada y turbulenta llega la visita de Osasuna a El Molinón en un partido que puede ser clave. No es que una derrota deje al equipo en Segunda, ni un triunfo signifique la permanencia, pero hundirse más en la clasifiación sería muy peligroso.
Empieza la era Tejada, con otros aires y con unas ilusiones renovadas. Quien conoce a Iñaki y sus métodos de trabajo no le puede sorprender lo que ya demostró en sólo tres días, de mostrar una imagen de técnico trabajador, con conocimientos, personalidad, una gran dedicación y mucha insitencia en los preparativos de los partidos, además de emplear tiempo en organizar los entrenamientos.
La ideología del fútbol de Tejada es más similar a la de Marcelino, con quien tuvo sus inicios, antes de las etapas de Ciriaco y Preciado. Su ilusión es grande y se merece todos los apoyos y la suerte del mundo. Seguro que aprovechará bien la oportunidad. El primer paso es ganar a Osasuna, una labor de todos.