En realidad todos los son, porque ningún equipo en esta categoría da facilidades. El Sporting está en un buen momento y necesita confirmarlo ante el Castilla, un equipo que tiene calidad y juventud, con un estilo de juego rápido y que produce respeto, cuando menos. De todas formas, la seriedad del conjunto rojiblanco, que llevaba siete meses de retraso, empezó a enseñarse en las últimas semanas.
El encuentro ante el Castilla vuelve a ser otra final. Luego quedarán otras diez, con una ilusión que debe alimentarse cada jornada con un triunfo, a la espera de lo que hagan los demás. La duda es si hay margen para llegar al sexto puesto. Ahora parece que todos ganan, lo que provoca dudas, que sólo se disipan o se maquillan con triunfos. De momento, la necesidad es ganar el sábado.
Sería interesante contar con el respaldo de todo el sportinguismo en las gradas de El Molinón. Es la forma de que el rival sea menos complicado, para sumar tres puntos y mantener la ilusión.