El entrono del Sporting tiene una euforia desmesurada. Parece que pasado el susto de Valladolid, se da por hecha la permanencia. La mayoría de aficionados piensa que las diez bajas del Recreativo y su situación anímica son aspectos que llevan a la victoria antes de conseguirla.
Me cuentan que varias empresas de hostelería están ya organizando las fiestas de celebración para la noche del domingo. Cada cual puede hacer de su negocio lo que quiera, pero es una imprudencia que en el club ya se valore esta posibilidad. y, además, que haya trascendido.
Me gustó la matización de Míchel tras la sesión de hoy: “De fiestas, nada”. Afortunadamente, ese es el sentir del vestuario, que tiene como primer objetivo ganar al Recreativo, por la necesidad de los puntos, sin tener que quedar pendiente de lo que hagan los demás. Los chavales tienen los pies en el suelo, que ahora es lo que más importa.
Y un detalle que habrá que tener con el conjunto onubense es de respeto. Es un equipo que llega con la desgracia a cuestas de un descenso. En Valladolid, la gente del equipo pucelano nos obsequió con el coro de “a Segunda” después del empate de Sesma. Las gentes del Sporting tienen más educación y no hacen leña del árbol caído. Además, el Recreativo no se lo merece.
PD1: Me pregunta un peñista de forma inocente si cuesta más la obra de remodelación de El Molinón que el metrotrén que no se sabe para cuando estará. También me pregunta si la estación del ferrocarril que no se usa, salvo para le paso de trenes, si fue gratis su construcción o si el Ayuntamiento tiene previsto algún uso para rentabilizarla. Habrá que trasladar las preguntas a los ediles responsables. A lo mejor lo saben.
PD2: Regresaron Noel Alonso y Landeira tras un año cedidos en el Melilla. No se les hizo un seguimiento demasiado exahustivo. La semana que viene se empezará a saber qué pasará con la gente. Habrá muchos cambios.