El Sporting decidió no presentar alegaciones, ni recurrir la previsible sanción a Karanka, por la expulsión que sufrió en Motril. La única defensa al jugador vitoriano es una información publicada en su página web, al comparar el mérito de Pérez Lima con el de Jacinto de Sosa, quien pasó a la historia como el árbitro que expulsó a Quini.

La tarjeta roja que el canario mostró a Karanka en Motril fue injusta, a lo que hay que añadir una actitud chulesca, muy propia del gremio arbitral cuando hablamos de mediocres. Es el caso de Pérez Lima, indecentemente casero. Pero el caso es que el club no defiende a su delantero, pese a que tiene pruebas videográficas de la inocencia de su futbolista. Da la sensación de que las decisiones se toman en función de quien sea el afectado. A Barral se le quitó una tarjeta amarilla, con la multa correspondiente. En el caso de Pina podríamos aplicar el mismo criterio.

El caso de Karanka es atípico. Llegó hace dos años y medio a Gijón, avalado por Eloy Olaya, en el inicio del proceso concursal, a cambio de Samuel y un puñado de euros. El primer año se encontró con un entrenador que tenía tres delanteros, pero sólo utilizaba uno. Y, además, se convirtió en el tercero de los atacantes, por detrás de Calandria y de Biagini. El año pasado se convirtió en el cuarto, después de haberse lesionado en la pretemporada. Luego, apenas intervino y cuando lo hizo, no tuvo fortuna. En marzo quedó propuesto para los descartes, pero se le comunicó en agosto. Ahora, en el club hay disposición de permitir su marcha en enero, pero al chaval no se le explica la situación. Ni a su padre, que es su representante.

Tal vez como pago a su escasa efectividad llega la decisión de no recurrir la sanción que el Comité de Competición hará esta noche. La interpretación más adecuada es que esta es una forma de dar la razón a un árbitro injusto, incompetente y poco serio. El detalle del acta, de poner que Preciado le dijo que “eres muy hogareño”, demuestra una capacidad intelectual muy pobre, sin que sus profesores le hayan explicado que el acta es para poner cosas normales. También puede suceder que se los hayan explicado y no lo haya entendido.

El caso es que la planta noble de Mareo se rinde ante los desmanes de un árbitro, aunque el presidente, el entrenador y todos los expedicionarios juraron en arameo tras el partido. ¿Con Barral habría recurso? Apuesten que sí.

PD1: Kike Mateo fue sometido a una ecografía en silencio. No se quiere que se sepa que está lesionado y que podría ser baja para el domingo. No entiendo el motivo. ¿Qué hay que ocultar?

PD2: Motril nos ofreció un mal partido. El campo no debiera estar homologado y hasta el árbitro no debería estar en activo, pero es lo que hubo. Hay que saber jugar con imponderables. La única medicina es el gol. Por cierto, Hidalgo no marcó con el Pasto, que perdió en el campo del Equidad. Si sigue perdiendo, puede llegar antes a Gijón.