Si por algo puedo sentirme afortunada es no solo por haber presentado mi segundo libro, “Kirguistán, en moto por el paraíso de los nómadas” ante una institución tan solemne como la del Ateneo Jovellanos de Gijón, sino también por haberlo hecho con el autor del prólogo, Domi García, presidente del Harley Davidson Club Asturias, a quien me gustaría agradecer enormemente todo el apoyo en las diversas presentaciones que hemos hecho conjuntamente durante estos dos meses que lleva publicado. El pasado 21 de febrero tenía lugar una de las más ilustres sin lugar a dudas, en las cuales, una vez más, me sentí realmente arropada por todos los asistentes.
Poco a poco, todo parecía ir tomando forma. Era hora de ir preparándose,..
Los primeros en llegar fueron los moteros del Harley Davidson Club que no quisieron perderse la intervención de Domi, de quien tengo que decir, que hizo una presentación de diez.
Berto y sus amigos también estuvieron presentes…
Mi amiga Loli fue la encargada de atender la mesa en la cual se encontraban los libros para su venta. Otros nombres de amigos, como el de Marcos y Sonia, Nieves,…no puedo dejármelos en el tintero por su trascendencia. Sin duda, la foto que no podía faltar fue la que nos sacaron a los tres miembros de la mesa, en la cual me acompañaron Domi García y el presidente del Ateneo, Luis Rubio Bardón.
Las sorpresas siempre son bien recibidas y una de ellas fue la del motero Pablo Cuerpo, quien no quiso quedarse sin su ejemplar.
Y para encumbrar el acto, una de las personas de esas que yo diría que “sin saberlo, marcan nuestras vidas”: Quintana. Y es que si, hace unos 16 años más o menos, me hubieran dicho que el hombre que me hizo la prueba de conducción de autobús que determinaría si yo estaba “apta” o no para entrara a formar parte de la empresa ALSA, estaría años después en la presentación de mi libro elogiándome como lo hizo, no daría crédito alguno. Parece ser que, por aquél tiempo, fue él quien me enseñó a mi y, años después, según él, soy yo la que está enseñándole a él. Así es la vida y las vueltas que da y, desde aquí, le envío un enorme saludo y agradecimiento por su presencia en un día tan importante para mí.
Las luces se apagan, se levanta el telón,…”Kirguistán” comienza y con él, la función. Mil gracias a todos y cada uno de los que hacéis posible que estas presentaciones sean todas y cada una de ellas especiales.¡Nos vemos en la siguiente!