Ubicado a 630 metros de altitud en el valle del río Coto, este pequeño pueblo a orillas de la AS-29 en el desconocido gigante que es el occidente asturiano será nuestro protagonista en esta ocasión. A tan solo 22 kilómetros de Cangas del Narcea(concejo al que pertenece), aquí podremos encontrar un remanso de paz y huir del bullicio de los gentíos y el estrés de las grandes ciudades para calmar un estilo de vida en el que el reloj cada día es más importante dejando de lado nuestra tranquilidad.
La primavera acababa de hacer acto de presencia y el sol invitaba a subirse a la moto y recorrer el paraíso asturiano. Poco tráfico en esta zona, como de costumbre y paisajes espectaculares arropados por impresionantes bosques de robles, hayas, acebos y castaños entremezclados con árboles de ribera.Nos encontramos en la Reserva Natural de las Fuentes del Narcea y, muy próximas al pueblo podremos visitar siete brañas, algunas con las cabañas en muy buen estado de conservación, siendo la más grande la Braña del Seladín.
A la entrada del pueblo se encuentra la capilla de San Bartolomé celebrándose la fiesta el 24 de agosto.
En el pueblo se pueden contemplar algunos ejemplos de arquitectura tradicional bien conservados.
Y otros no tanto.
Entre sus tejados, el cielo azul presagiaba un día caluroso y con ausencia de lluvias.
Daba gusto pasear por sus calles silenciosas.
Detalles.
Poca gente o más bien nadie me encontré durante mi visita pero siempre estuve acompañada.
Aunque fue cierto que, para alguno, mi presencia allí no le inmutó lo más mínimo.
Creo que no hace falta tanta ya pues el invierno no volverá. Aún así, la leña nunca está demás en estos lugares.
Continué recorriendo la AS-29 para encumbrar la subida con el ascenso al mítico Pozo de las Mujeres Muertas desde donde pude avistar, de nuevo, la belleza sin parangón de una zona de Asturias, el occidente, que en muchas ocasiones parece ser la gran olvidada.
Y así, cerramos la puerta de esta crónica para poder abrir otra y seguir explorando el paraíso asturiano de una manera increíble, sobre la moto.