Situada a 358 metros sobre el nivel del mar, esta aldea perteneciente al concejo de Cangas de Onís será la que atraiga toda nuestra atención en esta ocasión en la que exploraremos este pequeño rincón del oriente asturiano. Rodaremos por la AS-340 desde Corao hasta Nueva de Llanes no sin hacer antes una parada en la Collada de Zardón(parroquia del mismo nombre a la que pertenece Igena).
Carretera rota y estrecha que esconde paisajes como este en el que uno se quita el sombrero ante la majestuosidad del panorama que le rodea y no es para menos.
A casi 4 kilómetros de aquí, el pueblo se nos aparece empozado entre las montañas y no queda otra que descender y recorrerlo a pie.
Mi presencia en este solitario lugar no dejó indiferente a alguno.
Y, sobre los tejados, el verde de las praderías asoma enseñando una belleza sin parangón, la de Asturias.
No faltaron las notas de color en un día gris que parecía no querer enseñarnos lo mejor de la “tierrina”.
Aún así, pasear por Igena transmitía paz y tranquilidad. Lejos del mundanal ruido de las ciudades, aquí uno puede escuchar el trinar de los pájaros. Numerosos ejemplos de arquitectura tradicional salpican las calles del pueblo.
Desde los cuales se puede tener una impresionante vista a las montañas.
Me sentí privilegiada por poder ser testigo de tan magna belleza en solitario. No podía faltar una pequeña capilla.
En mi mano, la llave de la cerradura a un lugar mágico, Igena.
En el cual cada rincón es digno de ser inmortalizado.
Y donde uno se liberará de las cuerdas y ataduras que supone el hecho de estar rodeado de intenso tráfico e inmensas aglomeraciones de gente para escapar hacia la libertad que supone el hecho de rodearse de silencio.
Donde podremos calmar nuestros estómagos en la quesería del pueblo, Toriello.
Y cuya visita culminaremos con el ascenso a un lugar no menos impactante que es el Alto del Torno desde donde podremos saludar estampas inolvidables de Picos de Europa.
Un relato que es toda una invitación a bajarse de la moto y conocer otro rincón de esta Asturias que enamora a quien la conoce. No lo dudes porque Igena te espera.