“Mucho más que ciencia y técnica, la cocina es emoción”. Estaba todavía masticando la frase de Blumenthal cuando empezó el partido. Había estado leyendo un reportaje sobre el famoso cocinero inglés por la tarde. Y a las diez seguía dándole vueltas, pensando que mucho más que cualquier cosa, cualquier cosa que merezca la pena es emoción. O debería serlo. Y entonces alguien se la da a Barral y comienza el baile. Y ahí está el de San Fernando, entre Maradona, Fred Astaire y hasta Chiquito de la Calzada. Y allí va y mete gol. Y yo no sé si con mucha suerte, con mucho talento o con una mezcla de tanto por tanto, pero me acordé de Blumenthal y de su helado de desayuno de la infancia en Cornualles. Tal vez porque fue emocionante. Y pensé que casi cualquier cosa, casi cualquier cosa que merezca la pena, claro está, puede serlo. En la cocina, en un campo de fútbol, en la calle y hasta en una caleya. Ánimo con ese lunes.