Las críticas realizadas por los socialistas gijoneses a Gabino de Lorenzo, descalificándolo como candidato electoral por su furibundo localismo, fueron contestadas por Pilar Fernández Pardo, al afirmar que Gabino se limitó durante los pasados años a defender la ciudad de la que es alcalde. Según Fernández Pardo, una cosa es agraviar a los demás y otra defender lo de uno. Precisamente, esa es la crítica de los socialistas gijoneses, que De Lorenzo se excedió en sus actuaciones como alcalde, siendo beligerante con los proyectos de otras ciudades asturianas. La concejala gijonesa, y aspirante a diputada, señala que a los socialistas les preocupa la candidatura de Gabino. En este punto lleva razón Fernández Pardo, los socialistas están descolocados ante el salto de Gabino a la política nacional, porque tiene un modo de operar nada convencional: rehúsa radicalmente los debates, pide entrevistas por escrito, realiza campañas publicitarias impactantes y es capaz de prometer todo lo que la gente quiere oír. Los socialistas estaban preparados para competir con candidatos, modelo Rozada o Reinares, pero no para enfrentarse al estilo populista de Gabino.

La concejala gijonesa alude a la inexistencia ó irrelevancia del programa del PSOE. Esa carencia la comparten los principales partidos porque hasta ahora las únicas ofertas que han lanzado son de carácter general, centradas en las rebajas fiscales. En esta cuestión Rajoy supera, aún, a Zapatero, con propuestas muy costosas de asumir por el erario público, como la elevación del mínimo exento del IRPF hasta los 16.000 euros o la “feminización” de dicho impuesto, con rebaja de 1.000 euros para todas las mujeres. Falta por conocer las ofertas específicas para las regiones.

Fernández Pardo asegura que De Lorenzo defenderá Asturias con la misma pasión que Oviedo. Ese es el asunto a dilucidar, doña Pilar. Gabino puede representar a nuestra región, como cualquier otro diputado, pero tiene un matiz diferenciador: es el alcalde de Oviedo. Tendrá que compatibilizar la representación de los intereses asturianos y de los ovetenses. Muchas veces podrán coincidir, porque van en la misma dirección, pero en otras podrán colisionar. Para un diputado que es alcalde, el reparto de fondos mineros o de subvenciones culturales no se hace con los ojos cerrados.