Tras entrevistarse con el presidente en funciones del Principado, Gaspar Llamazares ha manifestado que no apoyará a un gobierno socialista en minoría parlamentaria, porque la legislatura se convertiría en un “vía crucis” para los asturianos. El dirigente de IU ha dicho que la situación pide un acuerdo fuerte de izquierdas con contenido programático.
Llamazares es el diputado con más experiencia política de la Junta General del Principado. Ha sido diputado autonómico y coordinador general de IU en Asturias; posteriormente, fue portavoz parlamentario de IU en el Congreso de los Diputados y líder federal de IU. Es también el diputado más conocido por los asturianos. Al regresar a su tierra no se le puede pedir que plantee la política asturiana de una forma distinta a como lo ha hecho siempre. Llamazares cree en los acuerdos de izquierda, entendiendo por ello los pactos con los socialistas. Cuando Julio Anguita inauguró la estrategia de las dos orillas (en una estaban el PSOE y el PP, y en la otra IU y las fuerzas de progreso, como los sindicatos, colectivos ecologistas, etcétera) Llamazares asumió los correlatos de esa línea política, que en Asturias dio paso al Gobierno de Sergio Marqués. Instalado en Madrid no volvió a confundir a los socialistas con los populares, ni a Zapatero con Aznar y Rajoy. Llamazares no tiene plan b, cree sinceramente en la bondad de los pactos con los socialistas, su problema es que el único líder del Parlamento que está dispuesto a luchar por ese objetivo.
Javier Fernández tiene otra perspectiva completamente distinta. Los pactos de izquierda los recomienda para los ayuntamientos, pero para el Principado prefiere el menú ligero de los acuerdos puntuales. Frente a los grandes acuerdos programáticos que propone Llamazares, Javier Fernández se conforma con aprobar uno o dos presupuestos anuales y a tirar que son cuatro días. Si Asturias va mal, ya llegarán tiempos mejores. Qué más da lo que digan Gaspar Llamazares y Emilio León, si lo único que cuenta verdaderamente es lo que hagan Mario Draghi y Ángela Merkel. Llamazares habla de pactos de mayorías y Javier Fernández se conforma con el apoyo de los 14 escaños del PSOE en la votación de investidura. En la política, y en la vida, las relaciones binarias se rigen por la regla del máximo común denominador. Llamazares quiere todo y Fernández sólo pone un poco. Conclusión: sólo negociarán los presupuestos.