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Juan Neira

LARGO DE CAFE

CHEQUE EN BLANCO

Los decretos ley aprobados por el Gobierno en los consejos de ministros celebrados durante los dos últimos meses han sido convalidados por la Diputación Permanente del Congreso. La operación le ha salido redonda a Pedro Sánchez. Nada más disolver las Cámaras y convocar elecciones, desde la Moncloa se fijó una estrategia audaz para ganar los comicios recurriendo a la capacidad de disposición del Consejo de Ministros. Así nacieron los llamados ‘viernes sociales’, bautizados con inimitable gracejo por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Nada de programas electorales, que todos los partidos los tienen, se parecen mucho entre sí y nadie los lee, mejor recurrir a un arma que solo tiene la formación política que gobierna, el BOE. Viernes tras viernes abriendo los informativos con noticias que benefician a miles o millones de destinatarios concretos que siempre le estarán agradecidos al presidente por haberse acordado de ellos: prolongación de la baja paternal, subsidios para los mayores de 52 años que están en paro, reinversión del superávit de los ayuntamientos, apoyos al alquiler de viviendas, etcétera. Noticias positivas, ilusionantes, que convierten a Pedro Sánchez en un benefactor. Con esa amplia corriente de simpatía llegará el presidente en funciones a las urnas y allí recibirá el plácet para prolongar su estancia en el palacio por espacio de cuatro años.

Los partidos de la oposición habían criticado duramente la utilización de los consejos de ministros como órgano de propaganda electoral. Una crítica sin ambages de los partidos de la derecha, mientras que la oposición de izquierdas tiene tal embrollo mental a estas alturas de la película que tanto patalea como aplaude. Convocada la Diputación Permanente a los partidos les tocó retratarse.

Izquierda y nacionalistas cerraron filas con el Gobierno dando su apoyo a los seis decretos ley. Ciudadanos apoyó uno, se abstuvo en otros y rechazó el resto. El PP dijo que no a todos. Si se analiza el contenido de los decretos hay argumentos para votar en una u otra dirección, pero a 25 días de las elecciones lo de menos es el articulado de la norma, lo de más, el apoyo o rechazo al Gobierno. Los que respaldaron en bloque los seis decretos validan el uso que hace Sánchez del poder; Ciudadanos tiene un pie en cada orilla; y el PP votó con espíritu de enmienda a la totalidad. Resultado: el presidente recibió el cheque en blanco que necesitaba para ganar las elecciones.

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por JUAN NEIRA

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