Está todo el pescado vendido para las elecciones del domingo? Hay estudios demoscópicos que cifran en el 20% los ciudadanos que deciden su voto los últimos días, por eso tiene sentido pelear por los sufragios. Los candidatos buscan atraerse al sector de los decepcionados. La mayoría no lo están con unas siglas concretas, sino con el sistema, con la democracia, con el paso de los gobiernos sin solucionar los problemas. Sin embargo, la motivación de fondo es acertada. La gente que no sabe qué votar tras oír hablar durante semanas de demografía, empleo, etcétera, sólo puede salir de la indefinición apelando a sus sentimientos. Moviliza mucho más pedir el voto contra fulanito que pedírselo a favor del medio ambiente. A dos meses de las elecciones juegan los razonamientos, a dos días de las urnas sólo empujan las emociones.

Barbón combina el voto de miedo (gobierno PP-Vox), con llamadas al electorado del PP que esté desencantado con su partido. Creo que es más una forma de erosionar la imagen de Canga que de ganar votos. No apela al electorado que está a su izquierda, bien sea porque lo juzga escaso o por no molestar a los futuros socios parlamentarios. Canga centró su discurso en el voto útil, con la mente puesta en los votantes de Ciudadanos y Foro. En esa franja del electorado está su margen para crecer. Con el PSOE por delante en las encuestas, pide concentrar el voto en el partido mayoritario de la derecha. En la campaña también pidió el voto para los socialistas que apoyaban a Javier Fernández. De esa tierra no saca un tomate. El estudio de las elecciones de 2019 demuestra que Barbón heredó íntegro el electorado de Fernández y sumó a los antiguos votantes socialistas que se habían refugiado en otras siglas.

Zapico (IU) se dirige a un perfil concreto: los progresistas frustrados por cuatro años sin cambios. IU tiene los mejores resultados cuando el PSOE flaquea (autonómicas de 1995, 2012, 2015), de ahí que busque quitarle electores. En esta ocasión, quizás sea más permeable la frontera con Podemos. Tomé (Podemos) pretende movilizar a los perjudicados por la gestión política (parados, enfermos en lista de espera). La clave para los morados es movilizar tras la división interna. Pumares (Foro) ataca al PSOE y al PP «por tomar decisiones en Madrid y Bruselas». Si un día se toman solo en Oviedo no sé qué pasará con las pensiones. Carolina López (Vox) continúa con su campaña de enmienda a la totalidad al Gobierno de Barbón y rechazo frontal a convertir a Asturias en territorio trilingüe.