En el Foro ABC, Francisco Camps ha declarado que nadie ha demostrado nada sobre las posibles adjudicaciones sospechosas de la Generalitat valenciana. Sobre las hipotéticas imputaciones que hay contra él en el sumario instruido por Garzón, el presidente de la comunidad valenciana ha sido rotundo al afirmar que «los trajes me los pago yo». Francisco Camps se mostró muy tranquilo por la gestión de su Gobierno, que realiza unas 3.000 adjudicaciones al año, y confía que en los próximos días se conocera el contenido del sumario.

Por más que la figura del juez Garzón esté sometida a controversia, no cabe tomarse a la ligera las investigaciones judiciales sobre la presunta trama de corrupción detectada en el entorno de las organizaciones del PP de Madrid y Valencia. Ahora bien, de lo filtrado hasta ahora del sumario el cabo más endeble es el que ata a Francisco Camps a la trama. Suponer que el presidente de una comunidad autónoma se mancha las manos por unas facturas de su sastre, cifradas en 30.000 euros, es francamente grotesco. Ni en los peores tiempos de la farándula marbellí apareció un político en escena dejándose sobornar por ropa elegante. Si el presidente de una de las más importantes comunidades autónomas de España, con cinco millones de habitantes, se deja seducir por ternos a la medida está ya intelectualmente incapacitado para el cargo. Lo de menos sería el apaño; lo peor sería la estulticia.

Francisco Camps compareció en el Foro ABC arropado por Mariano Rajoy, Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz-Gallardón, Rita Barberá y Javier Arenas. Con tan destacadas presencias el mensaje resultó nítido: Camps no será sacrificado por la dirección del PP en el caso de verse envuelto en un hipotético juicio por corrupción. Por su parte, el presidente valenciano elogió a Rajoy por constituir una referencia para toda la militancia del partido. Todavía es pronto para saber en qué medida acabará afectando el ‘caso Gürtel’ al PP, pero cabe conjeturar que el liderazgo de Rajoy no se verá afectado. Se esperaba que las noticias sobre la corrupción pudieran tener influencia en las urnas, pero del resultado de las elecciones gallegas y vascas no se desprende ningún efecto. Quizás en Madrid, donde hay dos figuras descollantes enfrentadas, pueda el ‘caso Gürtel’ dañar al PP.