Asistimos a una progresiva mercantilización de nuestras relaciones personales, incluidas las amistosas, familiares e incluso de pareja. La economía ha ido invadiendo todos los ámbitos, incluído el amoroso, y se cree en el principio de fomentar y cultivar las relaciones que nos producen beneficios y desechar las que nos incomodan, aunque sen familiares. El “te […]