Cualquiera que haya observado el mapa del conflicto en estos 4 meses, podría pensar,como nosotros, que una vez consolidados su frontera ESTE y asegurada CRIMEA, con el control de Mar de Azov, y Jerson, Mykolaiv y la mayor central nuclear de Europa Zaporiyia, sin tocar Jerson, Kiev y Odessa y el OESTE de Ucrania, Rusia estará dispuesto a sentarse a negociar.
Será Erdogan un intermediario natural.
Es posible que en cuanto pase el noviembre de Estados Unidos estaremos ante la posibilidad de una negociación, como sucedió con el grano.
Lavrov y Blinken,el viernes en Camboya, pueden hablarlo.