Era la crónica de un desplome esperado. El poderoso banco suizo, el famoso Credit Suisse, venía en bajada libre desde 2021 en que quebró el Greenwill Capital, pero se acentuó cuando se le condenó en 2022 por permitir el lavado de dinero del narcotráfico. Siguió bajando, hasta que ayer en 1.88 dls por acción, el socio principal el Saudí National Bank decidió no ayudar más.
El temor es que Credit Suisse sea para Europa el detonante que fue el Silicon Valley para Estados Unidos.
Esto está empezando, desgraciadamente.