Ante un Congreso a reventar, con las tribunas llenas, y periodistas nacionales e internacionales, ante la impaciencia de Ramón Tamames mirando repetidamente a su reloj, en las dos horas y cuarto de haberse iniciado la Moción de Censura sin haber podido hablar y viendo a Pedro Sánchez exhibiendo a Santiago Abascal y don Ramón, con su familia y Sánchez Dragó en las Tribunas,se debe de preguntar si sus 5 minutos de gloria , serviría para algo, y recordaría la frase que un periodista en las enésimas entrevistas en su casa y en su terraza, le preguntaba, ¿Y que pensarían de usted, todos sus compañeros de lucha?. ” Bueno estan ya todos muertos.”.