El Foro Sol abarrotado, 60,000 asistentes entusiasmados, todo en orden en la mesa de manado. En minutos aparecía Mike Jagger y su histórico grupo: Los Rollings Stone. Acababa de terminar la actuación de los teloneros, Maldita Vecindad, el grupo musical más popular de la” raza”. Fuera, incapaces de pagar los 500 pesos de la entrada, 3,000 jóvenes de Ciudad Netzahualcoyolt, muchos de ellos drogados, añoraban el no poder entrar, hasta que apareció aquel general.
Y el conjunto inglés, en sus Puentes de Babylonia, aparecían en escena, ante el entusiasmo de aquel público, donde en primera fila estaban los hijos del presidente Cedillo.
El nerviosismo de la mesa de mando crecía, pero tranquilos. Hasta ese momento todo iba bien.
De pronto, Enrique se acercó: ” Rafa, el general acaba de dejar que se abra la puerta y están entrando los de Neza, y muchos drogados”. Este se dirigió a la calzada que unía la puerta de la calle con la entrada al Foro Sol y observó el riesgo.Por instinto dijo: ” Voy yo sólo “,espérenme, les dijo a los mandos de las pòlicia, que, con su experiencia, vislumbraban el pánico dentro si entraban aquellos muchachos .
Rafael salió y se dirigió a los que encabezan el grupo, con los brazos en alto, les dijo. ” Compañeros, un momento,Compa….”y no terminó. Le habían mandado un ladrillazo a la cabeza, en la parte de atrás y sangraba abundantemente..Ante la preocupación de su gente, sin que se percibiese nadie en el interior, instintivamente, Rafael se sentó sólo en el suelo y les dió la espalda, por puro instinto. Ello paró a aquel grupo.
Cuando sintió que había parado la marcha, ante la vista de sus compañeros, se fue cara al jefe del grupo, algo asustados: ” Miren: si nadie se mueve de esta línea, remarcó, los dejo oír gratis el concierto, pero si uno solo pasa un centímetro les hecho a los caballos y a la policía que están detrás de mi”
Y resultó. Todos se sentaron en total silencio, Rafael se mantuvo dos y media horas en esa posición, mientras los médicos le curaban la herida, por fortuna no muy profunda, más que nada aparatosa.. El concierto se desarrolló con toda normalidad, con los asistentes sin haber observado nada, y la prensa era testigo.
Media hora antes de terminar, se levantó y se dirigido a aquellos 2,000. ” Bien compañeros, yo ya cumplí. Ayúdenme, vamos a desalojar para que cuando todos salgan no haya nadie. Respetuosamente aquello muchachos satisfechos obedecieron y al salir, gritaban algunos ” Viva el guerito””
Y termino el primero de los dos conciertos que darían, el siguiente sería el lunes. Y los 60,000 se retiraron felices de lo vivido.
Rafael volvió al palco con todos los que dirigían el concierto entre ellos lo de Ocessa. Le arreglaron el golpe, pidió un quisqui, y sentado tranquilo conversó, hasta el final con todo el equipo. Ese día se ganó el respeto del Comandante PabloLópez Jaramillo, responsable de la policía que lo acompañaría,ya ascendido tres años más.
En el argot policíaco, se decía ” Todo en X3″, cuando al final todo estaba en calma.
Esa noche, Rafael penso en su abuelo. ¿ De donde salieron esos genes?.
El lunes al llegar a las 13 hs. Diana, la Delegada, le marca su teléfono: Molesta, ¿ Rafael que pasó el sábado?, ¿ La prensa y Occesa están muy molestos, por que dejaste oír gratis a los 2,000 personas ?”.Rafael le explicaba, y ella insistía que sus gentes habían sido testigos y el reiteraba el peligro que significaba aquella provocación. ” Ah, entonces contra todos, tu eres el único que tienes razón”.
Rafael le colgó el teléfono. Tacones se oían bajando apresuradamente del despacho de ella al del subdelegado: “¡¡¡ Óyeme, Rafael, a mi ni mis amantes me cuelgan el teléfono!!!”, y se sentó.Cinco minutos de silencio total entre ambos, hasta que ella se levantó, le dio la mano al nieto de Belarmino y terminó el asunto.
A partir de ese día, Diana sabía que no iba a tirar a su Jurídico y de Gobierno.Se dedicó a otras áreas y descansó en el trabajo que le daba confianza de Rafael, al grado que meses más tarde Cuauhtemoc, descentralizara la policía, y Diana le pide que se lo dejaba a él.
Y Diana, se relajó, y meses más tarde le decía a Rafael: ” Quiero encargarte la delegación, por que me voy a Madrid a la Feria de las Ventas, sabes lo que me gustan los toros”.
Felipe le habia dicho una vez en La Moncloa: ” Rafael, en politica, los espacios no se piden, se ocupan “.
Y por supuesto, Rafael, con la policía a su mando, pudo empezar a tomar decisiones, con una fuerza y un carácter que el desconocía, Durísimo, pero negociador, resolvió todo. Sacó los caballos a las calles cuando lo necesitaba, los ponía a un metro de donde necesitaban estar, pero nunca un policía tocó un pelo a aun ciudadano.
Todo ciudadano que iba a verle, y cada vez más, era recibido y siempre con un cafecito veracruzano. Aquella impecable alfombra de su antecesor que casi no recibía, se fue desgastando de la entrada del pueblo, a veces hasta 40 personas asentaderas en el suelo.
Al terminar, en la mañana o en la noche, desde su escritorio gozaba, a través de los cristales, al fondo, la monumental bandera nacional de 12 metros de ancho y de 4 de alto, que se subía mecanicamente, tras de que 15 policias, la llevasen, con honores, hasta izarla en 10 metros de altura en aquel mástil, ondeando con el viento. El verde, blanco y rojo.
Una gozada.
En una visita de vecinos de la Agrícola Oriental que se quejaban de la ” esquina de la muerte” donde había tres giros negros, con drogas, prostitutas, alcohol adulterado y que no dejaban dormir, durante años a los vecinos, pero al quejarse, los dueños ya habían untado a las autoridades, sobre todo al responsable, el Jurídico y de Gobierno, cuando Rafael hizo un alto para entender la corrupción infinita, que durante 60 años el PRI había creado. Por ello, entrar a la política era que “la Revolución te hacia justicia”, por que en un puesto publico, podías garantizar hasta 3 generaciones.
La CORRUPCIÓN. Mañana hablaremos de ello.