Como siempre la izquierda se divide por ideología y la derecha se une por intereses. El miedo a Melenchon hace fracasar el Frente Republicano y acerca a Bardella a presidir el primer gobierno francés de la ultraderecha. Hay un seismo en la Unión Europea, tras las europeas, y sobre todo Francia, tras Italia y la posibilidad de Alemania.