Así como lo ha leído. A pesar de todo lo dicho por Occidente, el primer ministro de Reino Unido, al oído le dio su opinión. Hoy, cuando, al imponer aranceles a China, Canadá y México, habló de congelar la ayuda a Ucrania,hizo bien en dar vuelta atrás, y, entendiendo que sin TRump no hay salida, mandó este mensaje.