Lamentamos lo que le sucedio a Antonella, la esposa de toda la vida de Lionel Messi. Salió de compras en Miami buscando un buen vestido para una gala. Entró en la tienda y recorrió,ante la atenta mirada de las empleadas, hasta que finalmente encontró lo que buscaba. Al ir al mostrador aquella empleada, le dijo ” No puedo venderselo”, ante la insistencia del por que, ” llegó la responsable y le soltó: No puedo vendertela por no tienes capacidad de compra. Ve, si sólo lo que habla inglés lo tienen.”
El marido en pleno partido, salió de él, se fue aquella tienda, hasta que las despidió.Con su dinero podía comprar todo el edificio, pero en LOS ESTADOS UNIDOS DE TRUMP, EL RACISMO TRATA IGUAL a un latino, por muy esposa de Messi que fuera.
MIentras lo mejor de Estados Unidos se refugia en España o en México, hay quienes adoradores de los sajones y sus principios hacen el ridiculo en aquel país, que va a terminar mal.