Pues, ante la expectación de la prensa internacional, llegaron casi al únisono los dos aviones. Ambos llegaron a la alfombra roja, por separados y ahí se saludaron afectuosamente. Trump invitó a Putin a subirse en su auto y ahí, camino de la sede, dialogaron, pero, casi al mismo tiempo la Casa Blanca informó que se cancelaba la reunión privada entre ellos. Habra, además del traductcor, por lo menos un testigo: Marco Rubio y Steve Witkoff por EE:UU, y Lavrov por parte de Rusia.
(Al llegar el avión ruso horas antes con Lavrov y periodistas, comieron “pollo a la Kiev” y Lavrov, llegó con una camiseta que decia” Rusia” en cirílico, quizas para recordar que llegaba al territorio ruso que fue ).
Creemos que este hecho, hizo que Trump, reculara, se protegiera las espaldas y transformaba la reunion entre ambos, en una conversación en el auto..
Antes de llegar algo cambió que suspendieran el encuentro privado. Trump, quiso tener testigos. El Tigre, es mucho Tigre.
Dificil reunión para Trump