La actitud de los Estados Unidos con el gobierno de Trump, ha hecho que se produzca un acuerdo estratatègico entre Rusia y China, entre Vladimir Putin y Xi Jinping.
Un ejemplo ha sido la inauguraciòn del gasoducto de 6,000 kilometros de Siberia al norte de China y a Pekin, que inauguraron ambos mandatarios ayer por teleconferencia.
El Power of Siberia, se llama ese gasoducto que proporcionarà a China 38,000 millones de metros cubicos, y por el cual la debil economìa rusa recibirà 363,208 millones de dòlares.