Seguimos sin saber exactamente cómo quedará este nuevo (o vuelta al viejo) plan de vías. Ya saben, esa versión que amadrina nuestra alcaldesa, Ana González. En teoría, el principal cambio es que se va a ubicar la estación intermodal en Moreda, aunque existen también otros que iremos descubriendo con el paso del tiempo. El principal, sin duda, es que se parecerá como un huevo a una castaña a lo que pretendemos (y merecemos) los gijoneses. En definitiva, una estación digna acorde con el siglo en que vivimos. Después de 18 años esperando, oigan, ¡qué menos! Sin embargo, me entran serias dudas de que sea así. Más bien, la intención es construir una especie de pegote adosado a la provisional de Sanz Crespo, que pasaría a ser considerada como definitiva. Por lo que se intuye, digo, parecido a lo que propuso en su día la ministra de Fomento, Ana Pastor. Una obra más barata, eso sí, pero que en ningún momento cumplirá con las expectativas de una ciudad como la nuestra. Podríamos acabar, pues, con un apeadero de lujo alejado completamente del centro. Es cierto, como dicen los defensores de este obsoleto proyecto, que la centralidad está en las paradas del metrotrén. Ahora bien, corremos el riesgo de que dichas estaciones tengan más importancia y tráfico que la principal. Lo cual ya sucedió en Gijón con aquella terminal de Jovellanos que nunca tuvo aceptación. De hecho, ni los trenes de largo recorrido -para los cuales estaba pensada- acabaron allí. Todo el mundo prefería ir a El Humedal. La única estación que ha funcionado de verdad en esta ciudad.
Verán, yo no creo que el convenio defenestrado fuese perfecto. Ni mucho menos. Como decía nuestra alcaldesa, le faltaba -entre otras cosas- concretar la financiación. También que posiblemente sus expectativas fuesen muy altas: el importe global superaba con creces los 800 millones de euros. Por cierto, algo que ya se encargarían de rebajar en Madrid. Dicho en otras palabras: no hace falta que lo hagamos desde aquí. Volver a la versión de 2002 no es ni mucho menos un camino de vino y rosas, tal como nos lo pintan. Dicen que al ser más barato se hará antes. Falso: en el tiempo que estuvo vigente el plan recuperado no se movió ni una piedra para construir la intermodal. Así mismo que los tiempos se reducirán. Nuevamente falso: eso depende de la voluntad política que hasta el momento ha sido nula. En resumen, volvemos a empezar de cero y con más problemas incluso que antes.
@balbuenajm