El fin de semana es lo que debe reinar. Sólo fútbol, después de otra semana más en las que los protagonismos interesados salen a la palestra para explicar lo inexplicable a base de embustes, para maquillar imágenes de morosidad y de inmoralidad.
El Molinón tiene doble jornada. Por la matinal, el Sporting, con el incentivo de Hidalgo en el banquillo. El colombiano va a debutar en el transcurso de la segunda parte, salvo que ocurra algo inesperado. Si el resultado va bien, cómodo, el pastuso se presentará en sociedad. Y si las cosas no van bien, con necesidad de gol, con más motivo tendrá entrada en juego.
Es de esperar que las cosas vayan bien. Las Palmas llega con varias bajas importantes, pero con la ilusión de los sustitutos. De todas formas, en el fútbol influye más la calidad que la ilusión, aunque el entusiasmo es algo exigible a todos los contendientes. Sobre el papel, el Sporting tiene más calidad, en todos los sentidos, que los canarios.
La clasificación es como la prueba del algodón. No engaña. Y si el Sporting es tercero, tiene que hacer valer tal condición para superar a un rival que flirtea con los puestos de descenso.
Preciado tiene bien estudiado el partido. El cántabro cambió algunos detalles de los planes de entrenamientos. Más estrategias de campo, que son las que valen, y un plan B a base de paciencia, para cuando tarde en llegar el gol y las prisas no encuentren espacios libres. El Sporting es favorito, condición que hay que luchar durante otras 19 jornadas, además de la matinal del domingo, y acabar la temporada con Gijón inundando de bigotes, por la iniciativa de Iván y los dos Jorges, tres aficionados emprendedores y de corazon rojiblanco. No dejen de apuntarse en la página www.mevoyadejarunbigotincomopreciado.com
Por la tarde tocará el filial. El visitante es el Oviedo de Carrasco, quien tiene a la plantilla dividida. El palco estará vacío de foriatos. Los dirigentes del club azul no fueron invitados, como la lógica indica, después de las últimas actuaciones populistas para su hinchada radical, con morosidad e inmoralidad, al margen de las prácticas de bombero realizadas por José Ramón ‘Pinochito’ Prado. Que este caballero haya llegado a ser en Asturias director general de Deportes con el PP clama al cielo.
Sobre el papel, el Oviedo, que representa a la experiencia y a la profesionalidad, por aquello del dinero que se tiene, sobre todo cuando no se paga lo que se debe, es teóricamente superior al filial rojiblanco, un equipo en formación para un futuro. Es un equipo con un gran potencial económico que debería ser argumento para pasearse de calle por Tercera División. En la Copa Federación ya supo lo que era perder en El Molinón. A ver si se repite la historia.
PD.: Si gana el Sporting B al equipo de Carrasco voy a proponer a Iván y a los dos Jorges que hagan la página www.mevoyadejarunbigotoncomoacebal.com