La Real Sociedad siempre fue uno de los clásicos que visitaron El Molinón, con cierta similitud en la idiosincrasia de los dos clubes. Fútbol norteño y política de cantera, con dos ciudades de un aspecto parecido y de tradición futbolística, daban la sensación de que estos enfrentamientos eran una especie de derbi. Así ocurría en los años 60, a los que pertenece la fotografía de Ubaldo Puche, con Pocholo, Solabarrieta, Félix Llamazares y ‘Miluca’ Alonso, con un campo lleno y un ambiente de gala. Eran temporadas en las que el Sporting picaba la puerta de Primera, que tardó once años en abrir.
Después del encuentro de la primera vuelta parecía complicado aventurar que ambos rivales iban a llegar a estas alturas de la competición en una situación favorable a la Real, aunque sólo sea en un punto, y con la necesidad del Sporting tener que ganar, para no desinflarse.
Aunque después de este encuentro queden otras doce jornadas, lo que significa 36 puntos en juego, el equipo que dé el golpe de efecto tendrá mucho ganado. Puedo entender que los entrenadores quieran quitar dramatismo en el caso de que su equipo no gane, pero lo cierto es que tanto el Sporting como la Real, y con más necesidad los rojiblancos, precisan la victoria. Los donostiarras se distanciarían a cuatro puntos, lo que les permitiría cierto margen de error. Los rojiblancos pueden ponerse dos puntos por encima, los que significaría un buen respiro.
El empate parece que no disgusta a ninguno de los dos entrenadores. Eizmendi lo reconoce públicamente. Preciado más con la boca pequeña, aunque en su fuero interno no lo ve mal. En este supuesto, los de Anoeta seguirían con un punto más y los de El Molinón con el coeficiente a favor. Pero eso me suena a conformismo, al menos a priori. Luego, en función del desarrollo del partido, hasta puede ser un buen resultado.
Se enfrentan dos aspirantes al ascenso, lo que tiene que confirmarse con triunfos. Con empates se va muy despacio.
PD1: Quien volvió de Barcelona para pasar una semana en su domicilio de Gijón, con descanso en el tratamiento al que está siendo sometido. Va a estar en el palco. Seguro que transmitirá energía positiva.
PD2: Me prepocupa la ‘gasolina’ que les queda a los rojiblancos en el tramo final liguero. En algunos casos puede ser por un problema anímico, al tener en duda su futuro. En otros parece físico. Y quedan casi tres meses de competición.