¿SIN RELEVO GENERACIONAL EN IU DE ASTURIAS?
De momento, tanto Gaspar Llamazares como Ramón Argüelles manifiestan su voluntad de liderar IU con vistas a las próximas elecciones autonómicas, cuya cuenta atrás está a punto de empezar, lo cual no impide que, llegado el momento, puedan presentarse otras candidaturas que supongan un relevo generacional. En todo caso, no parece que vaya a haber retiradas voluntarias para dar el paso a otra generación.
A esto, hay que añadir otra cuestión de enorme importancia, y es que, en el tiempo que llevamos de legislatura autonómica, el grado de entendimiento de IU Asturias con el Gobierno de Javier Fernández, incluido su grupo parlamentario, ha sido mayor que el que hubo con Podemos, ello, al margen de desencuentros y de decepciones claramente puestos de relieve por los interesados.
Puede parecer contradictorio y paradójico que, a pesar de unos cuantos pesares, se hayan entendido tan bien con un Javier Fernández que, cuando estuvo al frente de la gestora del PSOE en Madrid, facilitó la investidura de Rajoy. Con un Javier Fernández que, además, pactó los anteriores presupuestos de Asturias con el PP.
Cierto es que en la presente legislatura el PSOE e IU no suman para una mayoría absoluta. De haber sido así, es altamente probable que el grupo que lidera Llamazares hubiese podido forzar el Gobierno de Fernández a unas políticas más sociales y avanzadas. Tampoco es menos cierto que, en lo que se refiere a sus continuos desencuentros con Podemos, en el más favorable de los supuestos para IU, no toda la culpa puede ser de la coalición morada. Y, para todo el mundo, no vale el mal menor: es decir, que Fernández a pesar de todo es de izquierdas. ¿Lo es en algo más que en las siglas?
Ahora mismo, a falta de lo que pueda llegar a suceder en los meses anteriores a los próximos comicios autonómicos, todavía cabe el esfuerzo por pactar con el Gobierno asturiano y con Podemos una serie de medidas que, en cierto modo, eviten la sensación de fracaso de una izquierda con una mayoría muy holgada que, hasta el momento, no alcanzó acuerdos importantes. Y ese esfuerzo lo puede y lo debe hacer también IU.
Se quedó muy atrás en el tiempo aquella aritmética parlamentaria que daba la mayoría absoluta al PSOE y a IU. A la coalición que lidera Llamazares le toca intentar la consecución de unos pactos de izquierda, sin perder de vista que Podemos también existe.
Y, por otra parte, tengo para mí que no es del caso incurrir en un conformismo de rendición, ante lo que no vino haciendo el Gobierno de Javier Fernández y ante Podemos que, al margen de otras consideraciones, tiene en su ADN combatir la vieja política y luchar por cambios nada cosméticos en la política.
