Lo dice el maestro mucho mejor de lo que yo podré hacerlo jamás. Dice el maestro que el miedo conduce a la ira, la ira conduce al odio, el odio conduce al sufrimiento… Y ese es justo el camino hacia el lado oscuro. Y al lado oscuro no conviene pasarse, si acaso sólo cuando es estrictamente necesario y siempre teniendo claro que el camino debe de ser de ida el vuelta. El problema del lado oscuro es que atrapa, así que, por si acaso, mejor ni probarlo. Más que nada porque, acordaros de Raskolnikov cuando mató a la vieja, cuando uno se salta ciertos límites el lado oscuro puede quedarse a vivir dentro de uno mismo, y lo hace para siempre. Tanto rollo es para, entre otras cosas, calmar un poco los ánimos de algunos, que han tomado este blog de plataforma para insultarse. Y qué necesidad. Respiremos, relajémonos y seamos felices. Aunque sea un poco. Aunque de aquí al domingo los nervios nos provoquen hasta pesadillas. La canción de la semana es para todo eso, y para mucho más. Pero ahí ya que cada uno ponga de su parte. Ladies and gentelmen, con ustedes, un TE MA ZO.