Ha terminado el culebrón electoral del PP. La propuesta inicial, realizada por Gabino de Lorenzo, tenía como norte la representatividad territorial y la búsqueda “de los mejores” para formar parte de una lista ganadora. De Lorenzo (Reinares) afirmaba que se había acabado el tiempo de los vetos y las exclusiones que tanto habían dañado al PP y lo llevaron a tres derrotas consecutivas en las elecciones autonómicas. A modo de aviso para navegantes, el alcalde de Oviedo aseguraba que se había terminado el tiempo de los caciquismos.
Unos días más tarde, tras intervenir la dirección nacional en la candidatura asturiana, nos encontramos con que la renovación auspiciada por De Lorenzo se queda en bien poco, porque de los siete parlamentarios que tuvo en esta legislatura el PP (cuatro diputados y tres senadores) cinco continuarán en Madrid, y sólo dos causarán baja, Alicia Castro y Leopoldo Bertrand. El cupo de incorporaciones se agota con Gabino de Lorenzo y Dorinda García.
Más significativo es el cambio de premisas en la composición de la candidatura. De Lorenzo anunció una lista formada bajo el criterio de lograr la representatividad territorial, por eso situaba a dos dirigentes de Gijón y Avilés entre los cuatro primeros candidatos al Congreso. Al final, en los cuatro primeros puestos van tres de Oviedo y Pilar Fernández Pardo. ¿Un ejemplo de representatividad territorial? La concejala gijonesa se da por contenta con la cuota que obtiene Gijón en las listas del PP, al situar a dos militantes gijonesas -Fernández Pardo y Dorinda García- entre los siete puestos que tienen posibilidades reales de obtener acta, bien sea al Congreso o al Senado. Cada uno es muy libre de sentirse a gusto con lo que le ofrezcan, pero cabe recordarle a Fernández Pardo que entre esos siete puestos de privilegio cuenta Oviedo con cuatro actas a las que cabe añadir el alcalde de Llanera que es más de Gabino que Reinares. La candidatura no es precisamente un ejemplo de representatividad territorial, sino la suma de Oviedo y su entorno con la inclusión de dos gijonesas. Ante la lista aprobada circulan dos versiones: un plan trucado de Gabino para despistar o la concreción de la lucha frontal entre De Lorenzo y Ovidio. Lo comentaremos.