Álvarez Sostres intervino en el debate sobre el Estado de la Nación, como miembro del Grupo Mixto. El único diputado asturiano que subió a la tribuna de oradores, como también fue el único que participó en los debates plenarios sobre los Presupuestos Generales del Estado. Estos simples datos mueven a reflexión sobre el papel de los diputados de a pie pertenecientes a las grandes formaciones de la Cámara, donde se limitan a participar en comisiones que les asignan. La problemática asturiana sólo se aborda en el pleno del Congreso de los Diputados cuando Sostres o Llamazares hacen preguntas sobre cuestiones que afectan exclusivamente a nuestra comunidad autónoma.
El diputado de Foro puso sobre la mesa la patata caliente de los fondos mineros, con una sentencia diciendo que los convenios anulados por el Ministerio de Industria deben ser reactivados transfiriendo 213 millones al Principado. José Manuel Soria no está por la labor. La postura del ministro resulta injustificable, pero como el Gobierno de Javier Fernández no es capaz de levantar la voz para reclamar lo que le deben a Asturias, se atreven a incumplir la sentencia. En la respuesta a Sostres el presidente del Gobierno no hizo referencia a los fondos mineros. Rajoy calló ante Sostres y Soria hace su particular lectura de la sentencia. Conclusión: el Gobierno del PP se niega a entregar lo que nos pertenece. Al ver la actitud del ministro, el Principado le pidió a Mercedes Fernández que interceda por los intereses asturianos. No es la primera vez que el Principado suplica a la jefa del PP regional que interceda por las demandas asturianas ante Madrid. Es el primer gobierno del Principado que recurre repetidamente a un subterfugio para evitar cumplir con sus obligaciones.
Sostres también planteó a Rajoy la relación existente entre la inacabada red de infraestructuras regionales y el escaso crecimiento económico y la pobre creación de empleo de Asturias. El presidente tiró de dosier y recordó los 2.169 millones invertidos en Asturias, el avance en la línea de alta velocidad Madrid-Gijón, y la próxima reanudación de los trabajos en la autovía, Oviedo-La Espina. Seamos objetivos: en el año 2014 a Asturias le tocó jugar el papel de cenicienta en los Presupuestos del Estado. Para el 2015 hay una mejora, pero muy insuficiente. Ahora bien, la atonía económica de Asturias no se debe a su aislamiento, sino al modelo adoptado y a sus gestores.