Cuelgo en mi blog hoy este poema porque considero que puede ser útil a muchos lectores que estén pasando por terribles momentos o conocen a quien los está atravesando. Su lectura ayuda a evitar el desmoronamiento emocional.
¡NO TE RINDAS!
Cuando las cosas vayan mal, como a veces irán.
Cuando el camino que transites se ponga cuesta arriba.
Cuando los fondos sean escasos y elevadas las deudas.
Cuando quisieras sonreir pero sólo te salgan los suspiros.
O cuando la preocupación te deprima el ánimo,
descansa, si debes descansar, pero ¡nunca te rindas!
La vida es una mezcla de giros y vueltas,
como todos sabemos.
Muchos fracasan por completo,
cuando podían haber triunfado, si hubiesen aguantado.
El éxito es la otra cara del fracaso.
El tinte plateado de las nubes de la duda.
Nunca sabrás lo cerca que estás del éxito.
Puede que estés muy cerca
aunque parezca muy lejano.
Por eso persiste en la lucha, cuando seas más fuertemente golpeado.
Cuando las cosas vayan peor, es cuando ¡no deberás rendirte!