Era principio de milenio en Francia. El mundo occidental estaba lleno de iglesias románicas. Ningún creyente podía conseguir la Biblia, que estaba, como en toda la Edad Media en manos de los sacerdotes, por ello parea saber algo, necesariamente  lo que valía era la voz del cura.

Eran iglesias y sombrías, de recogimiento, pero en 1081 nació un niño en Francia, que daría un giro sorprendente a esas iglesias románicas.Llegó a ser el Abad de Saint Dennis, pero también había leído la Biblia y le impactó el último libro del Evangelio según San Juan: El Apocalipsis.

Y ahí encontró que al final de los tiempos, serían 144,000 los que Dios Salvaría, pero además encontró a la tremenda ciudad  donde irían esos privilegiados: LA NUEVA JERUSALÉN.

Impresionante, altísima, llena de luz y aquel Abad apellidado Suger, desde ese momento, supo que su misión en la vida era crear algo parecido a la Nueva Jerusalén..

Audaz, con cercanía con el rey de Francia y luego con su hijo, ambos, por supuesto Luises y con un tremendo arquitecto, soñó en transformar la iglesia de esa ciudad francesa donde él era Abad.

Quería algo muy alto, mas cercano al cielo, pero tendría que llenar de luz, como en la Nueva Jerusalen.

Se dieron cuenta el y su arquitecto que levantar una nueva iglesia con esas características no podía hacerse con el arco romano e inventaron otro, que no soportase toda la enorme carga.

No sólo tenía que elevarla 29 metros más, sino que  la nueva iglesia tenía que estar inundadas de luz.Y de ahí surgieron en las parte superior la Rosetas, y todos los enormes vitrales donde se explicase el evangelio.

Era algo tan nunca visto, que tuvo enemigos, los circenses, pero Suger lo convenció, y a los 50 años de edad se lanzó a la construcción, sin darse cuenta que, al terminar y antes de morir a los 70 años había creado la primera IGLESIA GÓTICA DE LA HISTORIA.

Para obtener recursos, sacó todos los restos santos venerados en el sótano y los puso a la vista de los fieles y grandes adinerados, quienes pagaban por verlas o tocarlas.

Convenció a los circenses de que el no se estaba enriqueciendo, y sacó todas las reliquias, que están a la vista de la primera Catedral Gótica del Cristianismo.

Por cierto amable lectora o lector, ¿ Será usted,  uno de los 144,000 salvados?