En el 622 y durante casi 1,000 años, el Islam surgió y vivió su Edad de Oro.Faltaba una nación, la Árabe, que no tenía su religión monoteísta. La erupción del volcán El Ilopango en El Salvador en Centroamérica, que hizo caer al imperio persa, a los vándalos, el final de Teotihuacan, y que todas las culturas reflejan en su historia, fue de tal magnitud que durante un año en el 534-35, la cobertura de la tierra quedó sin recibir la luz del sol, y lo que llegaba a la tierra parecía la iluminación de la luna.En los paises escandinavos colocaban el oro que tenían para tratar de hacer regresar al sol, fuente de la vida.
Cosechas perdidas, hambrunas, muertes y angustias de nuestros antepasados fueron un hecho tan trascendental, que como hemos explicado en dos blogs anteriores, fué la base de que Mahoma sentará las bases de una religión heredera de Yahweh, de Jesucristo, y que hablaba de la vida más allá de la muerte, prendió en medio de la nación Árabe.
Marginados por Occidente, sometidos por los imperio judeo cristianos, motivaron algo que muchos no entendieron.
Ayer toda la Nación Árabe, vio reflejado su anterior esplendor en el triunfo de Marruecos sobre España, y salieron a las calles desde Fez hasta Riad,.
Por supuesto, a las reacciones de los musulmanes en Europa, vinieron actos de xenofobia.