Cuando aquel niño nació su entorno familiar era envidiable. El abuelo, que interpreto siempre en su carrera de actor al legendario Curro Jiménez, el padre que sería un actor importante. Poco tiempo antes, Teresa había perdido, a los 19 años, por una enfermedad sus dos piernas e iniciaba su vida ejemplar para millones de españoles.
Hoy Teresa Perales a sus 49 años, ha logrado con tesón y una voluntad que impresiona, en medio de una familia normal, una hazaña histórica: 29 medallas olímpicas, igualando al mítico nadador norteamericano Michel Helps, no realizado antes por nadie.
Dos españoles. Una en París festejando con una sonrisa que se ganó, el otro en la prisión de Tailandia, con un futuro incierto.
¿ En que medio vivieron los dos, antagónicos, ?. Cabria investigarlo