Mientras surgía Inglaterra en el 927, enfrente de ella, tras cruzar el Canal de la Mancha, había una poderosa región de Francia(la hay) llamada Bretaña.En 1,603, tras asimilar a Escocia y Gales, al total de la gran Isla se le llamó la Gran Bretaña.
Lanzada por el mundo, tras Colón, en América del Norte, en Africa, en Asia, en Oceanía fueron creando todo un imperio que duró hasta 1922. Estados Unidos, Canadá, Australia, India, Jamaica, Belice y más tarde hasta China,aquel pequeño país, se convirtió en el mayor Imperio de la Historia:El Imperio Británico.
En 1776, una de sus colonias se separa y crea los Estados Unidos de Norteamérica
Aun así, tras entrar en la repartición de Africa en 1884,en 1901, cuando muere la reina Victoria(por cierto fue el primer funeral publico de los británicos, para que los pueblos viesen a sus reyes o reinas), aquel imperio tenía 1 / 3 de la superficie del mundo y 2 / 5 partes de la riqueza mundial.
En 1922 el Imperio Británico tenía 680 millones de habitantes.
En 100 años, quedó el Reino Unido(Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte) y 16 paises más que mantenían como Jefa de Estado a Isabel II, como Canadá y Australia, entre otros, pero tuvieron la inteligencia de crear la Commonwelth, sus ex colonias, pero unidas y dependientes de ella.
Al morir Isabel II, el elemento cohesionador del Reino Unido y de lo que quedaba de sus colonias, empieza el fin de lo que fue aquel todopoderoso imperio británico.
Tras la pompa y circunstancia, en 2023, empezará la desintegración. En el Reino Unido Escocia e Irlanda del Norte, en las Islas Británicas, Australia en Oceanía, Canadá en América, Jamaica, Granada y Belice serán las primeras que irán llevando, como nos paso a nosotros tras ser el todo poderoso imperio, en 1648, en 1714 y en 1898, como decía Ortega y Gasset, volverán a su esqueleto original.
Hoy fuimos testigos del fin de un época histórica.
En plena crisis que se viene, posiblemente el Reino Unido, vuelva a formar parte de Europa y Carlos III, tendrá que abdicar en favor de su hijo, ante la disyuntiva: Monarquía o República.