El día que visite Castropol me dió tristeza, pero cuando escuché y observé al descendiente de aquellos emigrantes,Miguel Díaz Canel,el sucesor de los Castro y hoy Presidente de Cuba, me impresionó. Carácter, inteligencia, mesura.
Aunque se observan movimientos positivos de EE:UU., él se lanzó. Se fue a Argelia, más tarde estaba en Moscú con Putin, luego en Ankara con Erdogan y de ahí a Pekín a entrevistarse con Xi Jinping, recibido con cariño para todos los que saben que significó la Revolución Cubana, Fidel, Raúl, el Che y un pueblo que tras más de 50 años de bloqueo miserable, sigue en pie, en muy malas condiciones.
Ayer se dirigió al pueblo cubano: ” Nuestros aliados, Argelia, Rusia, Turquía y China, nos van a ayudar a reestructurar la deuda y a empujar la infraestructura, los recursos que necesitemos, y la economía del país”.
Maduro tuvo el petroleo para que cambie Estados Unidos, y Díaz Canel lo encontró en el mundo multipolar que se está conformando en el mundo.