El inicio de todo gobierno siempre es optimista, porque con independencia de la coyuntura, ahí están los rostros de los flamantes ministros/as trasmitiendo ilusión. Si España fuera Bibiana Aído estaríamos todos dando saltos de alegría, porque empezar la semana de peatón y enterarse el jueves que vas a acabarla de ministro es como para gritar […]