Los socialistas mantienen el plan de negociar con IU el futuro gobierno de coalición, aunque el PP ha entrado en escena paralizando la reforma del Estatuto de Autonomía. El PSOE trataba de mantener separadas las dos negociaciones –Estatuto y pacto de gobierno-, pero han quedado conectadas por el PP, de forma que los tres partidos están unidos en un juego de gana/pierde. Repasemos las metas de los tres partidos.
El PSOE es el partido hegemónico en Asturias, ha ganado todas las elecciones autonómicas, menos una, y tiene cincuenta y cuatro alcaldes, de modo que aspira a imponer su hoja de ruta: reforma del Estatuto y, cuando el texto esté definitivamente encarrilado en la Junta, presentación del nuevo acuerdo de gobernabilidad. IU busca principalmente entrar en el gobierno, por lo que ya se sentirían satisfechos con la consecución de este objetivo, pero si, además, el PP bloquea la reforma del Estatuto, pensarán que están soñando despiertos.
El plan del PP no resulta tan evidente. La lógica de los grupos que constituyen alternativa de poder es erosionar a los gobiernos, así que los pactos entre los dos grandes partidos son muy escasos en las comunidades autónomas, así como a escala nacional. Sobre este particular cabe añadir que los pactos firmados por Zapatero, cuando estaba en la oposición, con Aznar, fueron una excepción, propia de un partido que se encontraba muy débil (el PSOE de los años 2000-02), y utilizaba la táctica de los boxeadores castigados: abrazarse al rival.
El PP ha dado la aprobación parlamentaria a los créditos solicitados por el Principado y ha aceptado las propuestas de reforma de Estatuto planteadas por los socialistas. La dialéctica de confrontar con el Gobierno ha sido sustituida por la búsqueda de acuerdos desde que empezó el presente año. Un cambio de estrategia tan obvio nunca fue explicado. Si uno se olvida de colores políticos y clichés prefabricados, y se atiene a la materialidad de los hechos, tendrá que concluir que el PP de Ovidio Sánchez ha dado todos los pasos que podía dar para formar una alianza con los socialistas, cuyo siguiente paso debía ser la aprobación de los Presupuestos del Principado para el año 2009. Al enterarse de que el Gobierno ya tiene otro socio, deshace el camino andado. ¿O hay más cosa?