Nadie podrà decir en el futuro que las advertencias de Macròn de que estamos como en los años 30, no eran ciertas.
En Roma, acaban de reunirse ayer, los lidereches ultraderechistas de Europa, con la presencia del Movimiento Hermanas de Italia que encabeza Georgia Melonia, con el 12 % de las votaciòn italiana y con Viktor Orban primer MInistro de Hungrìa y Santiago Abascal lider de Vox.
El Movimiento de Steve Bannon sigue avanzando en Europa, tras consolidar a Trump en los Estados Unidos, pero se han ido a tal extremo que ayer los dejò plantados nada menos que el “capo de todos los capos” del nuevo fascismo europeo, Matteeo Salvini, por considerarlos demasiado extremistas, tras la derrota que le proporcionaron las “Sardinas”.
DIOS, HONOR Y NACION fue el lema de la reuniòn, con un enfrentamiento al socialismo, al neofeminismo, y una defensa de la Iglesia Catòlica y la lucha contra la Islamizaciòn.
Con quien va a destruir el sistema que nos hemos dado los europeos tras la Segunda Guerra Mundial, no puede haber contemplaciones. Por ello ayer todos los partidos, hasta el PP, marginaron de la presidencia de todas las mesas del congreso a Vox.
Ellos, de triunfar, sabemos la historia, no tendrìan ninguna consideraciòn contra todos los que se oponen a su pensamiento decimononico, por ello, en el Congreso, el mìnimo.Van bajando en las encuestas y el triunfo del Gobierno de Coaliciòn y su programa social, y mostrar su verdadera imagen como la del “rambo español” Ortega Smith, diparando el HK 436, en el Destacamento del aire de Murcia.
No, nos riamos, ni despreciemos. Esas actitudes fueron las que en los 20 hicieron popular a Moussolini y màs tarde a Adolfo Hitler.
Creo que Casado, leyò bien la lectura de Mateo Salvini, en su giro tras la derrota.