Retomemos la historia. Hace unos años, al principio del primer mandato de Trump, en los tiempos de Steve Bannon , dos figuras, judíos ortodoxos, se metieron hasta la cocina del Despacho Oval: Ivanka TRump y su marido Jared Kushner, los hombres del judaísmo en la Casa Blanca.
Todo poderoso, Jared habia hecho su gran fortuna recibiendo las concesiones de Netanyahu para colonizar los Altos de Golán y Cisjordania y ser el gran constructor de las miles de edificaciones en esos territorios ocupados, y llegaba a la Casa Blanca.
Del tamaño de se apego al judaísmo, debemos recordar que, en aquella, época, Trump, tomó el poder un sábado, y que para poder manejar y trabajar en “shabat” un rabino le hizo una disculpa.
Mal terminaron Jared e Ivanka.Pero siguieron con sus negocios.
Hasta uno vuelve a pensar que AQUEL ATAQUE DE HAMAS, fue permitido por el gobierno de Israel para crear las condiciones, cara a su opinión pública,a para acabar con los Gazatíes, destruyendo y limpiando la Franja de Gaza, hasta que llegara el momento salvador. Netanyahu, llevaba LA SOLUCIÓN DE JARED, que ya había hablado con Trump: “Como esta destrozada la Franja de Gaza, inhabitable, hagamos el gran negocio . Estados Unidos se queda con el control del territorio y Jared construye la Riviera de Medio Oriente. El pueblo israelita feliz, y el gran triunfo de Netanyahu, sólo necesitaban un apoyo : el de Trump.
Fiel a su estilo, ayer volvió a lanzar el anzuelo al máximo, para medir reacciones, como hizo en México, Canadá, Venezuela, Panamá Dinamarca y hoy presentó esta idea.
POR SUPUESTO TODOS LOS PAÍSES ÁRABES Y MUSULMANES SE OPUSIERON. (“Jared y Benjamin, lo siento, yo lo intenté pero ya vieron la reacción, A cambio de eso, voy a acabar con lo principal el arsenal nuclear de IRAN”).
Así se manejan los Imperios.
Mientras, a cada paso de TRump, se fortalecen los BRICS.