El general Serghueiv Surovikin, un alto mando que era el enlace del dueño de los Wagner, y que conocía la intentona, ha sido detenido, mientras el enviado del Papa Matteo Zappi, que ya estuvo en Ucrania y que Lavrov felicitó ayer, en Moscú, se reunió con un alto funcionario ruso para hablar de refugiados y de los niños de Ucrania, y hoy se ha encontrado con el Patriarca de Moscú Kirill.